Ayer
sentí que el invierno me tenía
reservada
una feliz sorpresa.
Develabas
mis pensamientos en voz alta.
-¿Y si
la vida fuese un misterio vano?
-Permanece
en tu elíseo, no seas cruel
con ese
vago sentimiento de esperanza
que a
nosotros, solo, nos queda. Otra cosa
es la
felicidad. Existe, tal vez,
pero no
la conocemos.
Versión de Jorge Aulicino.
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